Colombia
es un país, que desde hace más de cinco décadas se encuentra en un conflicto
armado interno, que según la GMH deja alrededor de 220.000 muertos y 7.500.000
desplazados, esta guerra se ha dado a conocer por los medios que él estado ha
aceptado que esten involucrados, a pesar de que cómo colombianos tenemos el
derecho de conocer los hechos y cambios que pueden alterar el futuro de nuestro
país, siempre hay un aislamiento de la realidad. Los medios quienes se encargan
de dar a conocer a la ciudadania el proceso que se ha ido llevando a cabo,
tienen un compromiso con el país de transmitir transparentemente la información
que nosotros los colombianos merecemos saber. Para llevar más a fondo este tema,
surge una inquietud de: ¿Los medios realmente han sido una herramienta mediática
entre los ciudadanos y un proceso llevado a cabo en otra nación? o ¿Han sido
más bien la “herramienta del estado” y revelan solo lo que al gobierno le
conviene que sepa la ciudadanía?
El
proceso de paz ha generado un auge significativo en los medios de comunicación,
los cuales le brindan al tema un protagonismo importante, como es debido.
Mientras los diálogos de paz toman desarrollo, paulatinamente se proporcionan
contenidos que informan y prestan determinadas miradas acerca del manejo y lo
referente con el proceso de paz, la radio, la televisión y los periódicos, son
los encargados de integrar al pueblo a la conversación nacional,
proporcionándole un continuo balance acerca de los hechos que se desarrollan
tanto en la habana-cuba, como todo lo referente con el país internamente,
pasando por planes de desarrollo, opiniones, encuestas, entrevistas, y demás. A
continuación daremos a conocer algunos ejemplos de lo anteriormente mencionado.
El
periódico EL ESPECTADOR saca a la luz pública tres importantes artículos que
valen la pena resaltar: El primero titula “Balance de dos años de diálogos”
publicado el 11 de octubre de 2014, el documento se centra en marcar los dos
años de diálogos por los que ha pasado Colombia y de ahí desglosar aspectos
expuestos en el artículo como lo son: el acabar las causas de la guerra, la paz
no se delega, la paz requiere firmeza, ciertas peticiones del sector agrario,
un proceso que no tiene retorno, una paz con condiciones, la paz es un
compromiso, victimas justicia y polarización, aspectos que después de dos años
de dialogo tienen que ponerse sobre la mesa y consolidar un plan de desarrollo
para cada uno de ellos. “La paz ya
viene” ese es el nombre del segundo artículo el cual daba cuenta de las opiniones del gobierno y las Farc, en
donde las dos partes manifestaban una postura de optimismo y miraban el proceso
de paz como la oportunidad para que Colombia finalizara esta guerra absurda. El
tercer artículo “Es la última oportunidad de vivir en paz” contiene el balance
personal del presidente Juan Manuel Santos, mantiene una actitud plena de
optimismo y comunica que se ha presentado un avance significativo, pero hay que
acelerar el paso, también pide más disposición por parte de la guerrilla.
Por
su parte la revista SEMANA, publica una encuesta realizada a 47 municipios,
entre ellos zonas gravemente afectadas por la violencia, en la encuesta se pone
en evidencia el descontento de la gente hacia la entrega de espacios de
representación política a los desmovilizados de las FARC, la mayoría de los
encuestados no están deacuerdo con este posible acto del gobierno. La revista
SEMANA es una de las fuentes que más protagonismo le presta al proceso de paz,
presentando siempre contenidos verídicos y ecuánimes acerca de este.
“Colombia
opina” es uno de los contenidos más completos que se han dado a conocer a la
luz pública, una encuesta realizada por la gran alianza de medios. Este
contenido claramente genero polémica y análisis en los medios de comunicación,
EL TIEMPO, SEMANA, LA FM, EL ESPECTADOR, BLU RADIO, CANAL CARACOL, CANAL RCN,
SEÑAL COLOMBIA y demás medios, le dieron pie a un análisis muy completo de la
encuesta acerca del proceso de paz, una de las conclusiones más comunes fue la
pérdida de credibilidad por parte de los
colombianos hacia el proceso de paz y hacia el presidente Santos, tras el
ataque de las Farc en el cauca, esto fue considerado como un espaldarazo a la
ilusión de cada uno de los colombianos por sacar este país adelante.
Los
medios de comunicación hacen parte importante en la construcción de un concepto
claro, acerca del objetivo y del constante desarrollo que toma el proceso de
paz, generan opiniones y crea miradas frente al tema, también aportan a la
consolidación de planes de desarrollo y campañas sociales que puedan contribuir
al positivo cambio. Además de cumplir su función de informar a la ciudadanía de
las transformaciones que se pueden dar en el proceso de paz, que podría cambiar
el desarrollo cultural y nacional del país.
Teniendo
en cuenta el punto anterior, la
introducción, y el análisis de los medios de comunicación en la nacion colombiana,
se realizo una encuesta en la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, donde
se buscó evidenciar los conocimientos que tienen las personas sobre el proceso
de paz y ver el punto de vista de cada uno de ellos frente a los diálogos. A
partir de esto realizamos una serie de preguntas donde se evidencio lo
siguiente:
Las respuestas dadas en
la encuesta frente al proceso de paz, se dividieron por género, siendo 20 el
total de personas encuestadas; 10 hombres y 10 mujeres se puede evidenciar que 7 de 10 mujeres y 9
de 10 hombres no están de acuerdo con el manejo que se le ha dado a la
información acerca del proceso de paz, mientras que 2 de 10 mujeres y 1 de 10
hombres lo están, además de esto 1 mujer no está enterada del
proceso. Esto demuestra que la mayoría
de métodos usados para informarse no son suficientes en contenido conceptual
frente al tema, quizá ahí entra el dilema moral de los periodistas al informar
cada suceso que esta en juego y la prudencia y capacidad de expresar cada
contenido para documentar adecuadamente. En la segunda pregunta se trata el
tema de la justicia transicional ya que es un aspecto que incluye a toda la
sociedad colombiana, 7 mujeres y 5
hombres creen conveniente aplicarla al actual proceso de paz, 2 mujeres y 5
hombres no están de acuerdo y 1 no está enterada del tema. Esto refleja que los
mecanismos para el reconocimiento de los derechos de las víctimas a la verdad,
justicia, reparación y las garantías de no repetición que se han puesto en
marcha desde entonces podrían aplicar al actual desarrollo, aunque no
contribuyan estratégicamente los esfuerzos provocan una reflexión en los
colombianos acerca del modelo más adecuado en Colombia, ya que es importante
contar con una política comprensiva de justicia transicional que aporte a la
transformación social de la guerra a la paz. Es necesario cambiar de ideología,
para poder superar el fenómeno de la violación de los derechos humanos que ha
transcurrido durante 50 años. En la tercera pregunta se tratan las
consecuencias que acarrearía la terminación del proceso, ambos géneros
concuerdan con ideas de pobreza,
retroceso económico y social, falta de atracción hacia el país en
cualquier aspecto, empobrecimiento cultural, sensación de desesperanza,
inseguridad, decepción frente al Gobierno, polarización política y puntualmente
las repercusiones de la terminación a un
acuerdo de paz son plasmadas en el sentido en que el conflicto armado se
posesionaria de manera más violenta en el país, una guerra sin fin, más
víctimas, y la continuación a la violación de derechos humanos. La cuarta
pregunta va en torno a la reacción de la sociedad colombiana frente a la
reintegración de los miembros de las FARC a la vida civil, en esta se ven dos
visiones polarizadas donde, por un lado, es positiva, ya que prima la seguridad
del país en la medida en que cesa el fuego, pero por otro lado las victimas
exigen justicia frente a estos individuos, todo depende de cómo se reintegren
los desmovilizados, siendo el postconflicto una etapa de aprendizaje y
cicatrización de heridas, a pesar de esto, puede suceder, que las personas
afectadas tengan sentimientos de impunidad y desaprobación porque no se toman
las medidas esperadas, sin embargo debe haber una colaboración de toda la
sociedad para llegar a la paz futura que espera Colombia; se trata de una
colaboración y participación en conjunto
de parte y parte, tanto de las FARC como de las víctimas. Y para
finalizar, la quinta pregunta radica en las negociaciones que se están dando
entre el Gobierno Nacional y la guerrilla de las FARC, 3 mujeres y 4 hombres están de acuerdo, 7 mujeres y 6 hombres no lo están. Esto
revela, que la mayoría de personas no aprueban estas negociaciones ya que
quedan muchos vacíos y dudas frente al tema, como la existencia o no de
condiciones necesarias para que el Estado inicie un proceso de paz creíble con
los grupos al margen de la ley y así evitar la reaparición de la violencia, en la
fase del posconflicto, debe haber preparación
y disposición económica, política y social, no solo por parte del Gobierno,
sino por parte de la sociedad civil para lograr una transformación y por último
el papel de los actores del conflicto en relación con el reconocimiento de la
verdad y su responsabilidad de reparar a las victimas.
Los
medios de comunicación, en la actualidad ya no se deben considerar el cuarto
poder, sino que por el contrario son el poder, son estos, los que tienen el
control en las naciones y a nivel global, puesto que brindan información o la
ocultan. En Colombia, el sistema mediático ha sido parte activa en el proceso, siempre
tratando de tener control sobre la ciudadanía, de ahí que se maneje una
estructura inestable, donde la cantidad de
contenidos informativos varia, confundiendo con fines persuasivos. Al
observar y analizar detalladamente el trabajo de estos en la sociedad
colombiana descubrimos que el desarrollo que se ha llevado a cabo en los medios, se
reduce a las necesidades y preferencias que la sociedad presenta: revistas,
periodicos, emisoras radiales, y canales de televisión son escogidas por un
público, además se debe tener en cuenta la alta acogida que tiene internet,
hecho que los conglomerados de medios han sabido aprovechar, y de esta manera
generan información de acuerdo a sus intereses, por consiguiente, hay una
afectación en el nivel de conocimiento que tiene la ciudadanía, cabe aclarar
que este perjuicio puede ser positivo o
negativo, y de ahí parten las contribuciones que puede o no hacer cada persona
hacia la consolidación del proceso de paz en Colombia,
Las
encuestas reflejan claramente que hay desagrado por parte del publico mediatico
frente a cómo se realiza la exposición de los contenidos referentes a los
diálogos de paz, aunque en este punto se puede diferir, ya que los ciudadanos
pueden exigir otras formas de estar enterados sobre el progreso de las
conversaciones, o por otro lado, siendo los medios un recurso para el fin de la
guerra, no están contribuyendo a este objetivo, sino que por el contrario realizan
un trabajo mediocre que mata la esperanza de una paz estable y duradera. ¿Pero será
la falta de conocimiento la que hace que se
oculte información por parte de los medios de comunicación? o ¿Realmente
el proceso de paz esta siendo proyectado y llevado a cabo de una manera
errónea, pero aun así los medios informan la verdad?
En
conclusión, la firma de los diálogos de paz entre el gobierno y la guerrilla de
las FARC, pueden transformar el país, pero hay que tener en cuenta, que para
transformar un país, es importante que su gente tenga los suficientes
conocimientos acerca de lo que se está viviendo, y una transparente y completa
información de lo que esta sucediendo y ha sucedido hasta la actualidad, de
este modo como nación que somos podremos forjar un futuro sin cometer esos errores
que solo dejaron barbarie y destrucción, solo con la verdad podremos renacer de
las cenizas.
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